Ahora anidan en tus labios mis temblorosos dedos, el metal de tus dientes perfora mi carne trémula y cada parte de mi cuerpo rendida ante tus manos se funden luz de luna. ¡Ay, amor mío! deja que mi sangre corra ligera por tus orillas, deja que tu vientre me envuelva como arena. tibia, húmeda y serena. Bienamada mía siente el latir de mi pecho, abraza con tu corona de noche las hojas sueltas de mi amor, recógelas y guárdalas en tu alma en flor. |
1 comentario
Cesar. -
desde ya te felicito!
pd: el de neruda me encanta:D jaja yo tengo el librito, es uno de mis favoritos!